El Salón Sorolla del Ateneo Mercantil de Valencia se llenó hasta la bandera el jueves 7 de marzo a las 19:30 h., para rendir homenaje a Vicente Albir por sus 30 años como delegado gubernativo en la Plaza de Toros de Valencia. El acto, organizado por la Diputación de Valencia, la Federación Taurina Valenciana y la Tertulia Taurina del Ateneo Mercantil, contó con la presencia de destacados representantes de todos los sectores del mundo taurino: toreros, médicos, veterinarios, asesores, presidentes, periodistas, Centro de Asuntos Taurinos, gerencia de la Plaza de Toros, entidades de aficionados, fotógrafos, etc., muestra del respeto y cariño que se ha ganado el homenajeado por sus servicios.

Paco Roger saludó a los asistentes, mostró su satisfacción y agradecimiento a todos, y explicó brevemente el desarrollo del acto.

A continuación, se proyectó un video de la vida profesional de Vicente Albir en el que se destacó su impronta y sello de rigor y seriedad en el puntual cumplimiento de las normas reglamentarias. Nacido en Camporrobles, ingresó en la policía en 1981. Tras unos años destinado en Pamplona, llegó a Valencia en 1986, y desde 2018 se dedicó en exclusiva a los festejos taurinos. El video se completó con mensajes de sus compañeros que no podían asistir al acto, y que destacaron su vocación de servicio, su entrega, dedicación y buen hacer en pro de la tauromaquia valenciana.

Tras una atronadora salva de aplausos, la mesa presidencial fue ocupada por el homenajeado acompañado a su izquierda por Ximo Ródenas Faubel, presidente de la Federación Taurina Valenciana, y a su derecha por Paco Roger, coordinador de la Tertulia Taurina y conductor del acto, quien destacó el concepto de autoridad que protege y vela por la fiesta como síntesis de la función que ha desempeñado Vicente Albir.

El método de preguntas y respuestas para explicar la labor de un delegado gubernativo desde el desembarco de las reses hasta el post mortem resultó muy ágil y eficaz. Vicente Albir, después de dar las gracias a todos, respondió de forma sencilla, clara y directa a las cuestiones planteadas por Paco Roger.

Las reses han de ser desembarcadas de los camiones que llegan precintados 48 horas antes del festejo. Comprobados los certificados y documentación de cada toro, se procede al pesaje con asistencia del presidente, y a un primer reconocimiento por los veterinarios y el presidente con el delegado gubernativo como secretario que levanta acta. La mañana del festejo tiene lugar el segundo reconocimiento. Todo el proceso sigue el reglamento nacional.

Por la mañana se realiza el reconocimiento de puyas y banderillas, y el pesaje de los caballos de picar en báscula calibrada y homologada. Se comprueban las medidas de banderillas, arpones, puyas y rejones.

En el enlotado y sorteo que dirige el presidente con presencia del delegado intervienen las cuadrillas. Con máxima limpieza y rigor tiene lugar el sorteo de los lotes según las costumbres y tradiciones de la Plaza de Toros de Valencia. Los papeles se colocan en tres bolas dentro del sombrero del mayoral, por orden de antigüedad de los toreros se sacan las bolas por los miembros de su cuadrilla que asisten, y queda establecido el orden de lidia de los seis toros, y dos sobreros.

En el desarrollo del festejo el delegado vela para que se cumpla el reglamento. Todo el equipo gubernativo tiene claro su cometido en defensa del público y de los que intervienen.

En la recogida de las llaves intervienen los alguacilillos, auxiliares del delegado. Es preciso controlar los pases de autorización de los que acceden a los burladeros interiores del callejón.

El equipo gubernativo está formado en una plaza de primera categoría por el presidente, el delegado y tres ayudantes. La clave es que todos saben muy bien lo que tienen que hacer.

En el post mortem deben estar presentes el presidente, el delegado, los veterinarios y representantes del ganadero, la empresa y los toreros. Algunas veces se han remitido las astas a Madrid para su examen, pero esto ocurre cada vez menos.

Vicente Albir destacó la importancia de no perder la seriedad y el rigor a la hora de cumplir el reglamento como se hace en Valencia.

En la Unidad de Policía Nacional adscrita a la Comunidad Valenciana dedicó cuatro años a la tarea de informar a los ayuntamientos de la instancia administrativa a la que deben dirigirse a la hora de organizar los festejos de bous al carrer.

Ximo Ródenas en breves y emocionadas palabras agradeció al homenajeado sus treinta años de entrega a la tauromaquia valenciana, lo que fue acogido con una gran ovación.

Paco Roger destacó los fundamentos de la misión de la autoridad en un festejo taurino: protección de la fiesta, orden y asesoramiento, y cerró el acto dando de nuevo las gracias a Vicente Albir, que acto seguido recibió los trofeos de la Federación Taurina Valenciana y de la Tertulia Taurina del Ateneo Mercantil de Valencia.

Una serie de fotos fue el colofón de un acto muy emotivo, de un justo y merecido homenaje a un servidor público, y de algún modo el prólogo de la Feria de Fallas.

Texto: Salvador Chapa

Fotografías: Litugo

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