El pasado miércoles 4 de julio el Dr. Daniel Ramón Vidal es CEO de Biopolis, SL, CEO de Lifesequencing SL y R&D Director de la Bioactives Unit en Archer Daniels Midland Company dio una gran conferencia sobre "¿Hacia dónde va la tecnología de los alimentos? El Dr. Ramón enfocó su conferencia, última de las 10 impartidas en el Ateneo Mercantil de Valencia dentro del Ciclo ‘La Segunda Era de las Máquinas: tecnología, innovación, empleo y sostenibilidad’, abordando esta problemática de forma positiva, llevando a los asistentes desde los problemas más importantes a los que se enfrenta la humanidad: hambre, obesidad, inversión de la pirámide poblacional, explosión demográfica, aumento de la infertilidad, cambio climático o gestión de los residuos, hasta las soluciones que pueden darse a los mismos, sin renunciar a ninguna de todas las posibles opciones que ofrece diferentes modelos de explotación agrícola (convencional, ecológica, de precisión o transgénica) para solucionarlos, así como a la aplicación de la secuenciación de genomas para entender las bases moleculares de las patologías más frecuentes, o el estado actual de la nutrición personalizada. A lo largo de la exposición se analizó en detalle como las nuevas tecnologías pueden resolver, o al menos paliar, algunos de los problemas identificados.

En relación con el hambre, que afecta en la actualidad a 800 millones de personas en todo el mundo, el hecho más preocupante, dijo el Dr. Ramón, era que, después de muchos años en los que se había conseguido reducir sistemáticamente la cifra de personas que eran víctimas del hambre, en 2016 se había incrementado la cifra de hambrientos en el mundo en 38 millones de personas. Sobre la obesidad, uno de los grandes problemas de los países desarrollados, el hecho de que desde 1975 se haya triplicado el sobrepeso y en España un 25% de la población está formada por obesos, nos da una idea de la magnitud del problema. Los cambios demográficos que se están produciendo en los últimos años, sobre todo en los países desarrollados, como es el caso de la inversión de la pirámide poblacional, el retraso de las parejas a la hora de tener hijos, la reducción del número de hijos por mujer fértil y los frecuentes problemas de fertilidad, la identificación de los problemas asociados al cambio climático y la gestión de los residuos, fueron también expuestos dentro del apartado de problemas actuales, con especial mención al problema del consumo creciente de agua, tanto en agricultura y ganadería, que representa un 87% del consumo anual del líquido elemento, sin olvidar que todavía hay en el mundo más de 900 millones de personas que aún no tienen acceso al agua potable…

En el apartado de soluciones el Dr. Ramón insistió en la necesidad de hacer un análisis sistémico de las soluciones a aplicar, en el que se contemplen las diferentes modalidades conocidas de agricultura; a saber: orgánica, convencional, de precisión o biotecnológica, sin olvidar la importancia que pueden tener los transgénicos, debidamente utilizados, en la solución del problema. La solución al problema del hambre podemos decir que pasa por un análisis objetivo y desapasionado de las diferentes alternativas existentes, más allá de planteamientos políticos o ideológicos que pueden contaminar las decisiones a tomar.

En la última parte de su exposición el Dr. Ramón describió brevemente el camino recorrido desde la creación en el año 2003 de Biopolis, empresa valenciana dedicada a la venta de proyectos de I+D en el ámbito de la biotecnología, que indudablemente se materializo en un proyecto de futuro, hasta la reciente incorporación de esta empresa al grupo Archer Daniels Midland Co, empresa estadounidense fundada en 1902, que tiene en la actualidad 44 centros de innovación y 31.000 empleados en más de 170 países, asumiendo el Dr. Ramón, fundador de Biopolis, la Vicepresidencia de I+D de la Compañía a nivel internacional.

Como un ejemplo más de los avances significativos que se han producido durante los últimos años el Dr. Ramón expuso uno de los logros alcanzados desde Biopolis con el uso del gusano Caenorhabditis elegans, para mimetizar enfermedades humanas cuyo desarrollo se puede prevenir mediante la alimentación, lo que permite reducir el tiempo necesario para una evaluación experimental hasta 21 días.

Finalmente puso especial énfasis en la necesidad de una valoración científica de las soluciones disponibles haciendo mención a la frase de Madame Curie “A lo desconocido no hay que tenerle miedo, simplemente hay que entenderlo”.