Grupo de Lectura 3. Fecha: 18 de Mayo de 2019. Lugar: Salón Sorolla. Nº de asistentes: 15. Editorial: AUSTRAL. Pág: 429

Autor: Miguel Delibes (1920-2010) fue novelista español, miembro de la Real Academia Española desde 1975 hasta su muerte ocupando la silla “e”. Licenciado en Comercio comenzó su carrera como dibujante de caricaturas, columnista  y posterior periodista de El Norte de Castilla, diario que llegó a dirigir para pasar de forma gradual a dedicarse enteramente a la novela y a su cátedra de Derecho Mercantil.

Sus centros de interés fueron según él mismo reconoció: la muerte, la infancia, su entorno geográfico castellano del que estaba profundamente enamorado como cazador y sobre todo la convivencia social y la solidaridad como respuesta a la violencia y la intransigencia que es el tema fundamental de su última novela El Hereje que hoy analizamos.

Tras contraer matrimonio inició su carrera literaria. Su primera obra “La sombra del ciprés es alargada” recibió el premio Nadal (1947). En 1949 su libro “Aún es de día” sufrió la acción de la censura. En 1950 publicó “El camino” historia de un niño en el descubrimiento de la vida y la experiencia ante la amenaza de dejar el campo y marchar a la ciudad; fue llevada al cine por Ana Mariscal.

Su producción literaria es enorme: “Mi idolatrado hijo Sisi (1953)”, “La partida (1954”, “Diario de un cazador” (1955) Premio nacional de narrativa, “Un novelista descubre América” (1956), “Siestas con viento sur” (1957) Premio Fastenrath, “Diario de un emigrante”(1958), “La hoja roja” (1959) de contenido existencialista, etc…

Los años 1960 representan su apogeo como escritor. Publica varias obras de su amada Castilla: “Habla Castilla”, “Viejas historias de Castilla la Vieja” (1960), “Por esos mundos”(1961), “Las ratas” (1962). Realiza un viaje a Alemania donde visitó varias Universidades. A su regreso publicó “ Cinco horas con Mario” considerada su obra maestra, cuya adaptación teatral fue representada por la actriz vallisoletana Lola Herrera.

Formó parte de la Hispanic Society of America y Publicó”El príncipe destronado”. Su discurso de ingreso en la Real Academia Española versó sobre “Un mundo que agoniza”, que posteriormente se editó como libro. En 1981 publicó “Los Santos inocentes” donde critica el caciquismo rural. Al año siguiente recibió el premio Principe de Asturias ex aequo con Gonzalo Torrente Ballester. Su última gran obra “EL hereje” (1998) obtuvo el Premio Nacional de Narrativa.

La novela: En el año 1517, Martín Lutero fija sus 95 tesis contra las indulgencias en la iglesia de Wittenberg, un acontecimiento que provocará el cisma de la Iglesia Romana de Occidente. Ese mismo año nace en Valladolid Cipriano Salcedo. En un momento de agitación política y religiosa, esta mera coincidencia de fechas marcará fatalmente su destino. Convertido en próspero comerciante se pondrá en contacto con las corrientes protestantes que, de manera clandestina, empezaban a introducirse en la Península, pero la difusión de este movimiento será cortada progresivamente por el Santo Oficio.

A través de las peripecias vitales y espirituales de Cipriano Salcedo, Delibes dibuja con mano maestra un vivísimo retrato del Valladolid de la época de Carlos V, de sus gentes, sus costumbres y sus paisajes. Pero El hereje es sobre todo una indagación sobre las relaciones humanas en todos sus aspectos; la historia de unos hombres y mujeres de carne y hueso en lucha consigo mismos y con el mundo que les ha tocado vivir. Un canto apasionado por la tolerancia y la libertad de conciencia, una novela inolvidable sobre las pasiones humanas y los resortes que las mueven.

Comentarios del grupo: El comentario general puso de manifiesto que es una obra excepcional que ha sido valorada con la máxima puntuación por la mayoría del grupo por el contenido social en la crítica de la intransigencia religiosa y por la forma literaria de la novela en que se destaca la riqueza de vocabulario, la profundidad en la captación y descripción de los personajes y el dinamismo narrativo del proceso. Hay quien comentó que hubiera preferido que el premio Nobel se lo hubieran dado a Miguel Delibes en vez de a Cela.

  • El Lenguaje: Fue un tema debatido en cuanto a la historicidad, alguien expresó que no refleja el momento histórico que se describe, sino una percepción actual de aquel momento histórico, pero la mayoría destacó la riqueza de términos que caracterizan la vestimenta, el modo de expresarse y el lenguaje castellano del siglo XVI. Hay términos que han caído en desuso, pero que reflejan cómo se expresaba la gente en aquel momento histórico. Si en una obra de teatro es importante la caracterización de los personajes, en una novela el lenguaje es la caracterización del ambiente y los personajes y es impresionante la amplitud, la variedad y la precisión de los términos con que se describe a los personajes y al ambiente en que se desarrolla la acción.
  • Los personajes: El personaje central es Cipriano, que fue descrito como “un pequeño gran hombre, valiente, comprometido y ejemplo como ser humano”. La falta de madre, que muere en su nacimiento; su padre le llamará por eso “parricida”, y el rechazo del padre hacen que su vida sentimental sea un fracaso siempre en búsqueda de la figura materna protectora en una relación asimétrica y no en una relación simétrica de pareja como compañera emocionalmente al mismo nivel. Formado en una religiosidad culpabilizadora y obsesiva busca en el luteranismo la liberación, la camaradería, la salida de sus escrúpulos y la liberación en la fe en un Cristo amoroso y liberador.
  • La religión: El protestantismo fue una reacción necesaria frente a la corrupción moral del papado y el clero que en parte vivía una vida disoluta y utilizaba la religión para obtener dinero por la venta de indulgencias y conseguir poder mediante el sometimiento por la culpa y la ignorancia.
  • El luteranismo busca volver a las fuentes, a la lectura de la biblia  y la interpretación personal de la misma. Es necesaria la interiorización  del evangelio en una relación personal con Dios. En el lado católico es la época de los grandes místicos como Santa Teresa (cuestionada por la inquisición) y San Juan de la Cruz y el surgimiento de los jesuitas, que siempre han sido la avanzadilla en la Iglesia por su espíritu crítico. En el lado protestante aparece Lutero (rehabilitado actualmente por la Iglesia), Calvino (que influyo en el nacimiento del capitalismo). Otros personajes del momento son Erasmo, Tomás Moro y entre nosotros Luis Vives.
  • La sociedad: Algunos compañeros apuntaron un aspecto interesante en el cambio del proceso productivo. Frente al sistema gremial de agrupación por oficios en que capital y producción van unidos, surge la división entre la fuerza productiva y el capital. Cipriano forma parte de los primeros capitalistas que en vez de limitarse a la producción desarrollan ideas nuevas en la confección de ropa y su trabajo fundamental es la comercialización en Burgos o en Centro Europa. Capital y trabajo se separan.
  • La naturaleza: Delibes es un enamorado del campo, la naturaleza es un tema recurrente al que ha dedicado un parte importante de su producción literaria. La novela no sólo describe el “cuando” y los cambios sociopolíticos del siglo XVI, sino el “donde”, en su amada Castilla que describe apasionadamente con un lenguaje que tiene un sabor añejo como el buen vino.
  • La violencia: Es el tema fundamental de la novela y posiblemente la preocupación más honda de Delibes, que vivió en su adolescencia la guerra civil española y al que le duele el alma de un problema nacional que siempre ha sido resuelto a medias. Como escribió el poeta: “Españolito que vienes al mundo te guarde Dios que una de las dos Españas ha de helarte el corazón”.

La Inquisición (a la que se puede poner todos los calificativos posibles menos el de “Santa”) fue lo más opuesto al Evangelio, por algo se prohibía leer la Biblia y mucho menos utilizar la inteligencia para interpretarla, los textos en latín para que nadie los entienda y si no se sabe leer mucho mejor. El amor expresado en servicio, se trasformó en PODER y dominación basado en el miedo. La reforma era necesaria.

Dostoievski analizó el alma del Gran Inquisidor que creía que torturando a sus víctimas podría salvar sus almas y evitar la propagación del mal. La ortodoxia se impuso a la ortopraxia. Es difícil entender la violencia de matar a un ser humano, pero más difícil es entender la “saña” con que se torturaba para liquidar lo más sublime que tiene un ser humano: SU LIBERTAD.

Los comentarios del grupo fueron expresados con pasión porque es un tema que toca muy hondo.